Panecillos de leche suaves y esponjosos.
Combinan perfectamente con dulce y salado.
Perfectos para preparar el almuerzo de los niños. Yo los corto por la mitad (como podéis ver en la foto) y los congelo recién hechos. Por la mañana los preparo con el pan congelado y a la hora del almuerzo están como recién hechos.